jueves, 8 de septiembre de 2011

Por fin florecen mis amaryllis belladona

Hace unos tres años, un amigo me regaló ocho bulbos de amaryllis belladona. Durante todo este tiempo he estado esperando  que florecieran y casi me quedo sin disfrutar de ellas. Al regreso de unos días de viaje me he encontrado sus flores en la plenitud de su belleza. Yo achaco la tardanza de su floración a mí impericia, ya que durante dos años, cuando se les secaban las hojas a finales de mayo, dejaba de regarlas y las arrinconaba, para volver a regarlas a finales de agosto, siendo, creo, este mi error. Este año las cambié de maceta y no he dejado de regarlas y, por fin, han florecido, alguna vara hasta con nueve flores. Cuando las cambié me sorprendió la forma de sus raíces, totalmente distinta de las de sus "parientes" los hippeastrum.








Va por Héctor.